sábado, 28 de marzo de 2015

Falleció el escritor e intelectual Carlos Pacheco.

El narrador venezolano murió a las 7:30 p.m. en Bogotá, víctima de un infarto; confirmó su esposa la también escritora Luz Marina Rivas.


Por: ANA MARÍA HERNÁNDEZ G.

"Queridos amigos: Anoche, a las siete y media de la noche, mi amado, mi dulce Carlos Pacheco sufrió un infarto que se lo llevó de nuestro lado. A pesar de todos los esfuerzos de médicos y paramédicos que lo atendieron enseguida, falleció en Bogotá. Estoy devastada", escribió a las 2 de la madrugada del sábado 28 de marzo la profesora Luz Marina Rivas en su muro de Facebook para comunicar la infausta noticia.

El deceso se produjo casi al comenzar el recital de la pianista venezolana Gabriela Montero en la capital colombiana. La músico escribió en su muro: "Anoche en el Teatro Colon, cuando estaba por empezar mi recital en Bogotá, un hombre a quien nunca conocí pero que obviamente fue muy querido al juzgar por su página en FB, murió de un infarto. No salgo de mi impresión y tristeza.
Descansa en paz, Carlos Pacheco, y que tu amor por la música te lleve y acompañe a ese mundo desconocido. Te abrazo. Dulces sueños...."

Carlos Pacheco fue editor del sello Equinoccio, de la Universidad Simón Bolívar; donde también se desempeñó como decano de Estudios de Posgrado, decano de Estudios Generales y coordinador del Posgrado en Literatura; así como profesor titular jubilado.

Para el momento de su deceso, Pacheco y su esposa, la también escritora Luz Marina Rivas, estaban residenciados en la capital colombiana. De hecho, Rivas es profesora de la Universidad Javeriana.

Pacheco nació en Caracas el 3 de junio de 1948; e hizo un doctorado en Letras Hispánicas en el King's College de Londres. Ocupó el sillón W de la Academia Venezolana de la Lengua.

Investigador y crítico literario, formó parte del jurado del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos en 1997, del Premio Internacional Pegasus de Novela (1998), de Premio Nacional de Literatura (1998) y del Premio Nacional de Humanidades (1999). También fue miembro del consejo directivo del Centro de Estudios Latinoamericanos "Rómulo Gallegos" (Celarg).

Entre las distinciones logradas por este humanista están Premio de Investigación Andrés Bello de la Universidad Simón Bolívar (1982), Premio de Crítica "Rafael Barret" de la Universidad de Oklahoma (1985), fue becario de la Fundación Fulbright como investigador invitado en la Universidad de California y del Deutscher Akademischer Austauschdienst de Berlín (2000).

Es autor de "Narrativa de la dictadura y crítica literaria" (1986), "La comarca oral. La ficcionalización de la oralidad cultural en la narrativa latinoamericana contemporánea" (1992), "La patria y el parricidio: estudios y ensayos críticos sobre la historia y la escritura en la narrativa venezolana" (2001).

Pérez Reverte, Murakami y 50 sombras entre los libros más vendidos.

La historia del millonario guapo y sádico que capturó los caprichos de los lectores en febrero aún generaba grandes emociones en marzo, a poco de lanzada la película.


Montevideo.- Dos nuevos lanzamientos --la última novela del español Arturo Pérez Reverte y la más reciente traducción del japonés Haruki Murakami-- se abrieron paso en marzo en el mercado librero en español, aún dominado por "50 sombras de Grey".

La historia del millonario guapo y sádico que capturó los caprichos de los lectores en febrero aún generaba grandes emociones en marzo, a poco de lanzada la película, pero las ventas comenzaron a recatarse para dar paso a las novedades del mes.

A continuación, los cinco libros más vendidos en el mercado hispanoparlante este mes:

1. "50 sombras de Grey", de E.L. James

El relato erótico del multimillonario Christian Grey y su relación sadomasoquista con la recién graduada Anastasia Steele dominó el mercado del libro en 2011 y vuelve ahora a dominar las ventas gracias al estreno mundial de la adaptación al cine el 14 de febrero, con Jamie Dornan y Dakota Johnson.

Grey es un multimillonario al frente de un imperio económico. Anastasia es una estudiante ingenua y sin dinero. En el "cuarto rojo" del "golden boy", lleno de látigos, esposas y aparatos de suplicios, el ejecutivo inicia a la joven en el sadomasoquismo.

Nacida en 1963 en Londres, Erika Mitchell (seudónimo E.L. James) es una exejecutiva de la televisión que se dedicó inicialmente a escribir historias del género "fan fiction", en el que se reinventan los personajes de novelas populares.

2. "El teorema de Katherine", de John Green

Los lectores hispanoparlantes descubrieron a John Green gracias a su novela de 2012 "Bajo la misma estrella", que cobró impulso después de haber sido llevada al cine y catapultó la traducción de sus novelas anteriores.

Publicada en inglés en 2006, "El teorema de Katherine", recientemente traducida al español, es la historia del joven Colin Singleton, con una afición por las chicas llamadas Katherine, quien se embarca en un viaje en carretera con su mejor amigo.

Nacido en Indianápolis en 1977, Green es actualmente uno de los autores estadounidenses más importantes de la llamada "Young Fiction" o literatura juvenil.

3. "Hombres buenos", Arturo Pérez Reverte

Lanzada el 12 de marzo, la última novela de Pérez Reverte cuenta la historia de dos académicos de fines del siglo XVIII que emprenden un aventurero viaje a París para recuperar la Enciclopedia de D'Alembert y Diderot, que entonces estaba prohibida en España.

Nacido en Cartagena en 1951, Pérez Reverte se convirtió en una de las figuras más importantes de las letras españolas tras dedicarse inicialmente al periodismo y cubriendo en particular conflictos de guerra. Su colección "Las aventuras del capitán Alatriste" ha sido desde su lanzamiento a fines de los '90 un gran éxito de ventas en el mercado en español.

4. "Hombres sin mujeres", Haruki Murakami

La última entrega del japonés Murakami es una colección de siete relatos "en torno al aislamiento y la soledad que preceden o siguen a la relación amorosa: hombres que han perdido a una mujer, o cuya relación ha estado marcada por el desencuentro", según publica la editorial TusQuets en su descripción del libro.

Murakami, autor de la aclamada "Tokio blues", nació en Kioto en 1949 y dirigió durante años un club de jazz, género musical que impregna su obra.

5. "La oculta", Héctor Abad Faciolince

En el mercado colombiano en particular, la última novela de Héctor Abad entró con fuerza tras su lanzamiento en noviembre, dominando poco a poco las listas de éxitos del mes y destronando a los omnipresentes best-sellers de E.L. James y John Green. La historia versa sobre una finca en un lugar remoto de las montañas colombianas, donde han vivido varias generaciones de una familia.

Considerado uno de los escritores contemporáneos más emblemáticos de Colombia, Héctor Abad Faciolince (Medellín, 1958) es escritor y periodista; fue columnista primero de la revista Semana y luego del diario El Espectador.

viernes, 27 de marzo de 2015

El Premio Rómulo Gallegos registra baja participación.

Celarg publicó una lista parcial de 133 novelas candidatas.


La edición 19 del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos ya cerró su convocatoria. La Fundación Celarg, ente organizador del galardón, publicó ayer una lista parcial de 133 obras postuladas al certamen (el número podría crecer si en los próximos días se reciben publicaciones enviadas antes del plazo final de admisión).

El Rómulo Gallegos 2015 tiene, hasta ahora, 68 novelas menos que las enviadas en 2013 (entonces participaron 201). De mantenerse la cifra sería el galardón con menos candidatos desde 1989, que tuvo 66 obras (ese año ganó Manuel Mejía Vallejo con La casa de las dos palmas). En 1991 se recibieron 138. 

Colombia es el país que más representación tiene en 2015. De la nación vecina destacan los nombres de Juan Gabriel Vásquez (Las reputaciones), Santiago Gamboa (Una casa en Bogotá), Héctor Abad Faciolince (La oculta), Piedad Bonnett (Lo que no tiene nombre) y Jorge Franco (El mundo de afuera). Veintiocho obras fueron enviadas del país neogranadino.

Venezuela sigue en la lista de países con más candidatos. Jacqueline Goldberg (Las horas claras), Fedosy Santaella (Los escafandristas) y Gustavo Valle (Happening) resaltan en un grupo de 22 obras postuladas. España, con 19 novelas, completa el trío de países con mayor representación (los autores Agustín Fernández Mallo, Limbo; y José Ovejero, La invención del amor, están incluidos). De la lista final (publicada en el sitio oficial www.celarg.org.ve) saldrá el sucesor del narrador puertorriqueño Eduardo Lalo, que ganó en 2013 porSimone (Ediciones Corregidor).

El poeta y Nobel de Literatura sueco Tomas Tranströner murió a los 83 años, según informa hoy el diario local "Svenska Dagbladet" citando a la Academia Sueca.

miércoles, 25 de marzo de 2015

John Banville: "Abrir un libro nuevo es una experiencia erótica".

"El libro va a sobrevivir en papel porque es maravilloso y contiene mundos enteros" y no se parece nada a leer en un dispositivo electrónico, que "no tiene textura, no huele, es insípido", asegura el autor.


La Coruña.- El escritor irlandés John Banville confiesa sentir un placer inmenso cuando la tinta de los periódicos se queda impregnada en sus dedos mientras los lee, al igual que cuando tiene entre manos un libro en papel que puede oler, tocar e incluso saborear.

"Abrir un libro nuevo es una experiencia erótica", asegura Banville, Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2014, en una entrevista con Efe con motivo de la inauguración hoy de la cuarta edición del Festival CoruñaMayúscula en la ciudad gallega de La Coruña (noroeste de España).

Banville (Wexford, Irlanda, 1945) comenzó su carrera como periodista, una profesión que cree que hoy en día corre igual suerte que los periódicos, que "están en peligro de extinción", pero que, sin embargo, "sobrevivirán".

Así como la sociedad se "obsesionó" con la electricidad en su momento pero "ya nadie hoy en día le presta atención", dentro de cincuenta años ocurrirá lo mismo con internet y las nuevas tecnologías, que ahora son como "juguetes".

Banville, que publicó su primer libro en 1970, una recopilación de relatos titulada "Long Lankin", y es autor de títulos como "Antigua luz", "El Mar", "Imposturas", "Los infinitos" o las negras "El Lemur", "El secreto de Christie" y "Venganza", prefiere que los libros tengan "buen aspecto", sobre todo los infantiles, que "tienen que oler bien y saber bien, porque los niños a veces los muerden".

"El libro va a sobrevivir en papel porque es maravilloso y contiene mundos enteros" y no se parece nada a leer en un dispositivo electrónico, que "no tiene textura, no huele, es insípido".

Galardonado con prestigiosos premios como el Booker, Frank Kafka y el Irish Book Award, es uno de los mejores escritores vivos en lengua inglesa al que le ronda el Premio Nobel, un galardón que reconoce que le gustaría ganar porque "es como esa ilusión infantil cuando te regalan por Navidad el camión de bomberos de color rojo".

Recuerda del momento en el que recibió el Premio Príncipe de Asturias el año pasado como algo "maravilloso", aunque no cree que los galardones sean "muy importantes" porque "no tienen un efecto real en el trabajo", y asegura que si fuera uno de esos escritores que se dejan influir por ellos sería "muy pobre".

Para Banville, un renovador del lenguaje y un estilista amante de la prosa poética y elegante en la que su ingenio y su humor negro muestran la influencia de Nabokov, el arte de la literatura es "hacer que estilo y contenido se fundan en uno", con una función importante del idioma, que hace que algunos de sus libros "no se puedan traducir".

En este contexto, el escritor irlandés lamenta el "desastre de perder el gaélico" porque "cuando una lengua muere, que hay lenguas que mueren cada semana, es algo que afecta a su gente porque conlleva una parte de la cultura que se va con ella".

Como autor de novela negra que se esconde bajo el seudónimo de Benjamin Black, resucita a otro monstruo sagrado del género, Raymond Chandler, a través de su protagonista Philip Marlowe, al que ha retomado para ser el eje central de su última obra, "La rubia de ojos negros", que centra hoy su participación en la apertura de la "misteriosa" edición de este festival coruñés de la literatura.

A 40 años de "En la casa del pez que escupe el agua".

La novela de Herrera Luque cumple cuatro décadas y se celebra con una tertulia entre Ana Teresa Torres y Carlos Sandoval.


La novela "En la casa del pez que escupe el agua" de Francisco Herrera Luque, cumple cuarenta años de su primera publicación y diecinueve ediciones.

Para celebrar este hecho, la Fundación Herrera Luque realizará una tertulia que contará con la presencia de los escritores Ana Teresa Torres y Carlos Sandoval, y la moderación de Roberto Lovera De Sola.

El libro relata una trama de componendas y de expiaciones de resentimientos sociales, de caudillos y montoneras. La dictadura de Gómez detallada con una ejemplar justicia narrativa e histórica.

La cita es para este sábado 28 de marzo 2015 a las 11:00 am. en la sede de la Biblioteca Herrera Luque ubicada en la 3ra. avenida, entre 2da. y 3ra. transversal, Biblioteca Los Palos Grandes, sótano 2. Valor Bs. 100,00. Información: fundacionherreraluque@gmail.com - www.fundacionherreraluque.org - 0212 2147966.

Los primeros pasos en el periodismo de Vargas Llosa, retratados en un libro.

En una entrevista con Efe, Gargurevich, de 81 años, explicó que la idea de este libro, que es una reedición del que publicó hace diez años en la Universidad Pontificia Católica del Perú, surgió mientras navegaba por los archivos del diario La Crónica y se topó con una "cosa mejor que la que estaba buscando".


Lima.Los primeros pasos en el periodismo del premio nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, con solo 15 años de edad en el diario La Crónica, cuyo ambiente le sirvió después de inspiración para su famosa novela "Conversación en la Catedral", son retratados en un libro del periodista Juan Gargurevich.

"Mario Vargas Llosa: reportero a los 15 años", publicado por Planeta, es el resultado de la investigación del historiador de la prensa peruana Juan Gargurevich, que presentará el libro en Lima el próximo sábado, cuando el nobel peruano cumple 79 años.

En una entrevista con Efe, Gargurevich, de 81 años, explicó que la idea de este libro, que es una reedición del que publicó hace diez años en la Universidad Pontificia Católica del Perú, surgió mientras navegaba por los archivos del diario La Crónica y se topó con una "cosa mejor que la que estaba buscando".

Lo que Gargurevich encontró fueron las primeras notas firmadas por Vargas Llosa en 1952, cuando inició su aprendizaje periodístico durante sus vacaciones escolares tras dejar el Colegio Militar Leoncio Prado.

Gargurevich recrea el bohemio periodismo limeño de los años 50 en el tabloide La Crónica, en el que el joven Vargas Llosa entabla amistad con otros redactores como Carlos Ney Barrionuevo y Milton von Hesse, quienes junto con el experimentado jefe de policiales Luis Becerra integraban un grupo que solía terminar las noches en algún prostíbulo.

El propio escritor recuerda en sus memorias "El pez en el agua" "las canas al aire de aquel verano de hombre grande" y menciona a Magda de la que cree que se enamoró "aunque entonces, sin duda, no se lo habría contado a ninguno de mis amigos de bohemia, pues ¿qué hombre en sus cabales se enamoraba de una puta?", recoge Gargurevich en su libro.

En su temprana incursión periodística, Vargas Llosa firmó varios artículos de opinión en la sección editorial "Nuestros redactores", que aparecen completos en el libro de Gargurevich.

El primero de ellos publicado el 16 de febrero de 1952 se titula "Esfuerzo a favor del teatro en el Perú" en el que Vargas Llosa elogia la labor de Guillermo Ugarte Chamorro al frente de la Escuela Nacional de Arte Escénico.

A este artículo le siguieron otros dos de salud, otro sobre los chistes y un quinto sobre los espectáculos de cachascán (derivado del inglés "catch-as-can", agarra como puedas) en el que se burla de las peleas que sostenían luchadores con nombres que se inventó.

Pero además, según Gargurevich, que también trabajó en "La Crónica" aunque no coincidió con Vargas Llosa porque entró dos años después, el nobel peruano también escribió notas policiales que no fueron firmadas.

El fuerte de "La Crónica" era la información policial que publicaba "con absoluta irresponsabilidad", ya que se inventaban los datos para "dar color" a las notas, recuerda Gargurevich que coincidió con Vargas Llosa en Radio Panamericana en 1958.

En su libro, Gargurevich atribuye a Vargas Llosa varias notas sobre sucesos policiales que conmovían en aquella época a los limeños que estaban bajo la dictadura de Manuel Odría.

Una de ellas sobre la joven artista francesa Jacqueline André que rodó por los acantilados de la Costa Verde limeña y fue encontrada muerta en la madrugada al pie del mar.

Gargurevich dijo a Efe que Carlos Ney Barrionuevo le contó que Vargas Llosa ponía el color a las notas policiales porque "era muy imaginativo" y hacia muy buenas descripciones.

En opinión de Juan Gargurevich, el impacto principal que tuvo para Vargas Llosa su paso por La Crónica es que lo hizo asomarse a "una realidad que él no conocía" de muertes, asesinatos, noches de trago y burdel y le hace "tener calle" a los 15 años.

Fue el propio padre de Vargas Llosa quien puso fin a las prácticas de su hijo en La Crónica al enterarse de que pasaba "malas noches en lugares de dudosa reputación", explicó el investigador en su libro.

Para el también decano de la Facultad de Comunicación de la Universidad Católica, "La Crónica" es un punto de partida para el Nobel peruano, "es una pista de despegue" y le descubre que "con su pluma puede vivir".

Según Gargurevich, la novela "Conversación en la Catedral" son "memorias que tienen que ver con la experiencia en La Crónica".

En la segunda parte del libro, Gargurevich también explica las diversas reacciones que provocó esta novela entre los periodistas del diario La Crónica en los que están basados algunos de los personajes de una de las obras cumbre del nobel peruano.

La vida de Clarice Lispector inspira la novela ganadora del Alfaguara.

Guelfenbein habló con todos los miembros del jurado y se puso "muy contenta" cuando le dijeron que la decisión se adoptó por unanimidad. Y eso que entre los 707 originales presentados había también otras novelas "muy buenas". La competencia fue "muy dura", le comentaron.


Madrid.- La vida de la escritora brasileña Clarice Lispector fue "la semilla" de la que nació la novela "Contigo en la distancia", con la que la autora chilena Carla Guelfenbein ganó por unanimidad el Premio Alfaguara. Una historia sobre "el talento, la mentira y la imposibilidad de los afectos".

Y una novela intimista sobre "las envidias entre escritores, ese sentimiento humano tan común y del que nadie quiere hablar. Ha sido un desafío hacerlo", afirmó hoy la ganadora en una entrevista telefónica con Efe, poco después de que el jurado le hubiera comunicado la noticia del premio.

El fallo de este premio, dotado con 175.000 dólares, se hizo público en Madrid, en un encuentro al que asistieron numerosos escritores, editores y periodistas.

Ganar este galardón es "como un sueño" para Guelfenbein (Santiago de Chile, 1959). "Es un salto importante para un escritor" por la difusión que tiene luego el libro en todos los países hispanohablantes.

Se enteró de la noticia cuando la llamó el presidente de jurado, Javier Cercas, a las seis de la mañana, hora chilena, y ella estaba dormida. Fue su hija la que recibió la llamada y, dado el asunto, la despertó de inmediato.

Guelfenbein habló con todos los miembros del jurado y se puso "muy contenta" cuando le dijeron que la decisión se adoptó por unanimidad. Y eso que entre los 707 originales presentados había también otras novelas "muy buenas". La competencia fue "muy dura", le comentaron.

La librera Concha Quirós le aseguró que su novela, "además de ser una historia potente, le iba a gustar a la gente", algo que a Carla Guelfenbein le interesa "mucho: poder llegar al lector".

Javier Cercas leyó el acta del jurado, en la que se destaca que, en la obra ganadora, "la autora ha sabido entrelazar amores y enigmas con una escritura a la vez compleja y transparente. Tres voces muy bien ensambladas iluminan las zonas oscuras de la mentira y de la verdad, del talento y de la mediocridad, del éxito y del fracaso".

La novela seleccionada habla "sobre la genialidad, la creatividad y la poesía". Estructuralmente, "Contigo en la distancia" es una obra "muy compleja", con varias historias que se entrelazan, dijo Guelfenbein a Efe.

Ocurre en dos tiempos, en los años cincuenta y en la época actual, y "hay cuatro personajes que están unidos por el de Vera Sigall, una escritora de culto", para la que se ha inspirado "de alguna manera en la brasileña Clarice Lispector".

Sigall es el apellido de la bisabuela de Guelfenbein, procedente de Ucrania, al igual que Lispector, una autora a la que la ganadora del Premio Alfaguara ha admirado desde siempre. "Hay muchos aspectos de su vida con los que me puedo sentir identificada", asegura.

En esta novela de tintes policíacos, el lector sabrá desde el comienzo que Vera Sigall ha tenido un accidente y está en coma. Toda la trama gira en torno a la vida de esta escritora, reconstruida por tres personajes adicionales que "van introduciendo a su vez nuevas historias".

"Es una novela de amor, pero también sobre el talento, la mentira, la imposibilidad de los afectos y la distancia entre los seres humanos", añade la autora.

En "Contigo en la distancia" se reflexiona sobre la literatura y la creación, pero "no es una obra hermética". Tiene también "un sesgo policial" porque desde el comienzo del libro se abre una investigación para saber por qué Vera Sigall está en coma.

La presencia femenina de Sigall impregna toda la novela, entre otros motivos porque esa mujer "comete el pecado mortal de ser más inteligente" que el resto de los personajes, subrayó Abad Faciolince, miembro del jurado.

El carácter intimista de la novela ganadora es un rasgo común a otras obras de esta autora que se exilió con su familia en Inglaterra en 1976, tres años después del golpe militar de Augusto Pinochet, donde estudió Biología y Diseño.

Guelfenbein comenzó a escribir desde niña y fue también una gran lectora. Su madre, "una filósofa de mentalidad práctica", le inculcó que trabajase en algo que la hiciera "independiente económicamente".

Y por eso, trabajó durante años como diseñadora gráfica, al tiempo que no abandonaba la literatura.

Hace quince años decidió dedicarse solo a escribir. "Contigo en la distancia" es su quinta novela, tras "El revés del alma" (2003), "La mujer de mi vida" (2006), "El resto es silencio" (2009) y "Nadar desnudas" (2014).

Anne Rice, la reina de los vampiros, corona a su príncipe Lestat.

La obra sitúa a los protagonistas, tanto viejos conocidos como nuevos, en pleno siglo XXI.


PALM DESERT, ESTADOS UNIDOS. El vampiro Lestat, al que inmortalizó Tom Cruise en el cine en 1994, regresa de un largo retiro para alcanzar su plenitud en una nueva entrega de las "Crónicas vampíricas" de Anne Rice que no será la última. "Es un tercio de lo que tengo que contar", asegura la autora a Efe.


"El príncipe Lestat", que también revivirá para la gran pantalla, es una obra coral, contemporánea, que retoma la raíz argumental de las cinco primeras novelas de la saga de 11 tomos que arrancó en 1976 con "Entrevista con el vampiro" y que pareció encontrar un final en 2003 tras la publicación de "Cántico de sangre".

Así lo creyó durante una década la propia Rice que, convencida de ello, proclamó en numerosas ocasiones haber dado carpetazo a las aventuras de sus bebedores de sangre.

"Me gustaba pensar que estaban ahí fuera, en la noche, pasándolo bien, pero realmente no sentía que tuviera algo más que decir", explicó la autora de 73 años en una entrevista con Efe en su casa de Palm Desert, un oasis al resguardo del asfixiante sol de marzo que calienta sin piedad el desierto californiano.

Rice terminó por echar de menos las vivencias de Lestat, el único de los personajes que ha creado a lo largo de su carrera que es para ella tan real que casi lo puede ver físicamente. Es, según su descripción, un varón joven de unos 20 años, bien parecido, que se asemeja mucho al cantante Jon Bon Jovi y al actor Rutger Hauer en su papel de replicante en "Blade Runner".

"Si estoy conduciendo por Nueva Orleans es como si estuviera ahí saludándome en la calle. Lo escucho si entro en un hotel hermoso. Me dice que es un buen sitio para dormir. Siempre está conmigo, pero eso no quiere decir que sea capaz de escribir desde su punto de vista", declaró.

Para su sorpresa, allá por 2012, Lestat volvió a hacerle confesiones al oído y el mundo de los vampiros le abrió las puertas de par en par, nuevamente. La novelista apuntó la fecha en su diario.

"Desde aquel momento (Lestat) ya no se callaría. Lo que se incluye en 'El príncipe Lestat' es un tercio de lo que tengo que contar", afirmó Rice cuyo nuevo libro, que se estrenó en inglés en octubre, debuta en español el 25 de marzo.

La obra sitúa a los protagonistas, tanto viejos conocidos como nuevos, en pleno siglo XXI, en la sociedad de los correos electrónicos, teléfonos móviles inteligentes, paparazzi y medios de comunicación digitales. Un entorno que contribuye a sembrar el caos entre los vampiros, desubicados entre tanta modernidad.

"La era de la información está generando una crisis de incalculables dimensiones para cualquier raza, grupo o entidad que dependa de un secreto", dice Rice en la novela a través de uno de sus personajes, una afirmación que ella suscribe y que extrapola a la Iglesia Católica.

La escritora, educada en el catolicismo, y fiel creyente en Dios y Jesucristo, renunció a la Iglesia en 2010.

"No sería la autora que soy sin mi herencia católica, la musical, la artística, los rituales, el latín... todo eso ha influido en mi escritura, pero no puedo aceptarlo en términos de teología y dogma", manifestó Rice, coleccionista de arte sacro a la que le gusta debatir sobre religión con su millón de seguidores en Facebook.

En "El príncipe Lestat", Rice traslada a sus personajes la eterna pregunta de quién somos y les pone a buscar respuestas a contrarreloj desde la ciencia y la espiritualidad para frenar a una poderosa amenaza ancestral y misteriosa, un desafío que obligará a Lestat a dar un paso al frente y convertirse en un líder.

La autora, nacida en 1941 en Nueva Orleans (Luisiana), está actualmente enfrascada en la continuación de esa historia, una novela que lleva por título provisional "Bood Paradise" (Paraíso de sangre) y que espera rematar este año para su lanzamiento en 2016.

Entre tanto, Rice está terminando de negociar los flecos de la adaptación cinematográfica de su saga vampírica que hará Universal Pictures.

"Todo tiene muy buena pinta", indicó la estadounidense que durante muchos años ha anhelado el retorno de Lestat a Hollywood, donde se le ha visto en dos largometrajes, la exitosa "Entrevista con el vampiro" (1994), y la discreta "Reina de los condenados" (2002), de bajo presupuesto.

Rice, que tiene una participación activa en el proyecto, apuntó que Universal se plantea lanzar desde cero una saga con actores jóvenes y poco conocidos, la misma fórmula que ya funcionó bien con "Crepúsculo".

César Aira: "El caso Nisman es la típica novela policíaca de Agatha Christie".

Descarta escribir un libro sobre el caso Nisman, al considerar que sería un "oportunismo muy feo".


NUEVA YORK. Haciendo gala de profesión, el escritor argentino César Aira, que se define más como un ávido lector, comparó este martes la truculenta muerte del fiscal Alberto Nisman con la historia de una "típica novela policíaca de Agatha Christie" en un apartamento cerrado.

"Tiene la característica rara de que si es un suicidio lo disfrazaron de asesinato y si es un asesinato lo disfrazaron de suicidio", ironizó en una entrevista con Efe en Nueva York, donde está presentando su último libro traducido al inglés.

César Aira (Coronel Pringles, 1949) asegura que la actualidad en su país no es una de sus fuentes de inspiración, como sí lo son los "sueños" o la "lectura", y por eso descarta escribir un libro sobre el caso Nisman, al considerar que sería un "oportunismo muy feo".

Nisman fue hallado muerto en su apartamento de un tiro en la sien el pasado 18 de enero, pocos días después de haber denunciado a la presidenta Cristina Fernández por encubrimiento de terroristas.

El escritor, que nunca viaja por placer porque "por placer se queda en casa", visita por primera vez Estados Unidos para presentar "The Musical Brain & Other Stories", una recopilación de veinte relatos que solo espera que tenga éxito para hacer felices a sus editores.

"Me tiene completamente sin cuidado, en realidad yo escribo por un placer personal y todo lo que signifique difusión me molesta más de lo que me gusta", asegura en la biblioteca del Instituto Cervantes de Nueva York, donde cuelga un retrato de Jorge Luis Borges, uno de sus compañeros de profesión a los que más admira.

Y es que en la ciudad de los rascacielos echa de menos su rutina de escribir una página al día cada mañana, y de (re)leer otras ocho horas, por lo que le gusta hablar de los autores a los que admira como Marianne Moore o William Faulkner, mientras que a la mayoría de sus contemporáneos los descarta y aborrece.

"Me mandan muchos libros pero me he hecho el paladar a Shakespeare, a Proust", indica, con casi noventa títulos a sus espaldas, uno de los autores más prolíficos del panorama literario latinoamericano. ¿Su secreto? Los relatos cortos.

"El libro que acaba de salir acá contiene más de veinte relatos. Con dos o tres de estos ya están mis obras completas... Creo que mis obras completas entrarían en una novela de Joyce Carol Oates", bromea Aira, que a sus 66 años ya se encuentra en una etapa de su vida en la que se ve capaz de mirar atrás.

Por este motivo se está pensando si no es "demasiado vanidoso" el crear una biblioteca en su casa con todos las novelas que ha publicado, desobedeciendo a su maestro Borges, a quien no le gustaba tener sus propios libros en sus estanterías.

"Yo me siento bastante orgulloso de lo que he hecho. Al fin y al cabo es el trabajo de una vida", dice un autor aplaudido y considerado uno de los máximos exponentes de la literatura argentina actual, una circunstancia que responde a que, a su juicio, siempre "se necesita un 'freak' (raro) para marcar la normalidad de los demás".

Al echar la mirada atrás, se encuentra en sus primeros libros con otro César Aira más joven y con más ganas de escribir que ahora, pero sin embargo con el mismo "solitario" cuyo amor por la profesión todavía le sigue empujando cada día al papel.

"Soy de esos raros escritores a los que les gusta escribir. Los escritores en general quieren ser escritores por todas las ventajas sociales y culturales que tiene ser escritor, pero para ser escritor hay que escribir, y en general he notado que no les gusta, lo ven como un trabajo feo y exigente", dice.

Una pasión que le sostendrá junto a su estilográfica, que sigue utilizando en plena era digital porque "la escritura manuscrita es la base de la civilización occidental". "Me voy a morir con la Montblanc en la mano".

Presidenta del PACAM pondrá en circulación dos libros.


SANTO DOMINGO. La presidenta del Patronato de Ayuda a Casos de Mujeres Maltratadas (PACAM), la psicóloga y terapeuta familiar, Evelyn Soraya Lara, pondrá en circulación este jueves 26 los libros "Desafío de ser padres", y "Familia. Diálogos sobre lealtad, aciertos y desaciertos".

Los libros serán puestos a circular mediante un acto a efectuarse a las 6:30 p.m., en el Salón Acuario del Hotel Barceló (Lina), y el producto de las ventas se utilizará en la subvención de programas del PACAM de psicoterapia de recuperación emocional para la mujer víctima de violencia y psicoeducativos para hombres.

Al exponer sus motivaciones, la autora expresó que "creemos en la familia, en las parejas, en los hijos, seguimos esperanzadas en nuestra misión de combatir la violencia y las injusticias en las familias dominicanas".

En "Desafío de ser padres", Lara orienta a los padres sobre la adecuada relación con los hijos que deben fomentar, así como sobre la manera de manejar los conflictos y situaciones propias de las diferentes etapas de crecimiento.

En tanto, "Familia. Diálogos sobre lealtad, aciertos y desaciertos", es un compendio de casos de consulta, en formato de preguntas-respuestas, acerca de diferentes temáticas.

martes, 24 de marzo de 2015

Herberto Hélder, un poeta de culto a la altura de Camoes y Pessoa.


LISBOA. La muerte de Herberto Hélder, un poeta de culto que desdeñó la vorágine mediática y social, priva a las letras portuguesas de una figura a la altura de Luiz Vaz de Camoes y Fernando Pessoa, aseguró a Efe Arnaldo Saraiva, especialista en la obra de Hélder.

"Su poesía (...) será comprendida en su grandeza en unos años (...) Es de un calado comparable a Camoes y Pessoa", analizó Saraiva, profesor de la Universidad de Oporto y amigo del poeta cuya muerte fue anunciada hoy.

Herberto Hélder (Funchal, 30 de noviembre de 1930 - Cascais, 23 de marzo de 2015) está considerado el mayor poeta contemporáneo de Portugal, a pesar de su poco política postura en relación a los premios literarios y a su aversión a la exposición mediática.

Dueño de unos oscuros, viscerales y laberínticos versos, Hélder estuvo influenciado por el francés Arthur Rimbaud, aunque, como los genios, "huía de las tendencias".

"La poesía de Hélder es un verdadero monumento musical. Extrae el poder de seducción de las palabras, sin aburrir al lector. Explora aquella que denomino 'extracto fonético', pero también trabaja el ritmo y, sobre todo, la tensión", opinó Saraiva, que alterna su docencia con la práctica de géneros como el ensayo, la crónica y la poesía.

Autor de más de una decena de obras, principalmente poéticas y algunas traducidas al español, al francés y al italiano, sus principales temáticas fueron el amor, sobre todo en su vertiente erótica, y la muerte, principalmente los últimos años.

No en vano, su último libro, del 2014, llevó el premonitorio título de "A morte sem mestre" ("La muerte sin maestro"), un éxito de ventas el verano pasado lanzado por Porto Editora.

"Es un gran poeta del amor, pero también es un gran poeta de la muerte", abundó Saraiva, quien citó un verso de su primera obra, "O Amor em visita" (1958): "A cada espasmo, yo moriré contigo".

Sin embargo, la muerte impidió a Hélder ver el lanzamiento de otro libro de cariz existencial, un inédito que finalizó hace cerca de un mes y medio, reveló Saraiva.

Alérgico a los premios y a la vorágine social, Herberto Hélder llegó a rechazar en 1994 el Premio Pessoa, uno de los principales galardones en Portugal, y, desde entonces, reforzó su fama de "poeta oculto" y, en algunos círculos, de eremita y arrogante.

Son muy pocas sus fotografías públicas -los medios lusos divulgaron unas en blanco y negro, en las que el poeta lucía una poblada barba blanca- y más escasas aún las entrevistas, que no concedía al menos desde hace 40 años.

Para el profesor universitario, amigo de Hélder desde hace décadas, era "un hombre muy afectivo y coherente" con sus allegados.

"Él negó entregarse a esa feria de las vanidades que devora el mundo de la poesía", remachó Saraiva, quien dio pistas de un cierto estoicismo de su amigo Hélder: "Desechó, en vida, algunas facilidades mundanas".

Casado y con dos hijos -uno de ellos un conocido periodista- y una nieta, tuvo intensas experiencias de vida, como sus trabajos de reportero durante la guerra colonial en Angola a comienzos de los 70.

"Decía que era un mundo 'natural', en el sentido de que todavía no había sido 'trabajado' por la civilización occidental", contó Saraiva.

De ascendencia judía, Hélder combinó su producción literaria con los más variados oficios, desde captador de publicidad a bibliotecario, de editor literario a periodista.

Desde que inició su carrera literaria, en 1958, cuando publicó "O Amor em visita", cuenta con títulos como "A colher na boca", "Poemacto", "Lugar", "Os passos em Volta" y "Apresentação do Rosto", una autobiografía censurada por el Régimen de António de Oliveira Salazar.

Fue reportero en la guerra colonial en Angola y, seguidamente, partió a Estados Unidos, en 1973, cuando compiló la obra "Poesia Toda".

Regresó a Portugal después del 25 de Abril de 1974, año en el que se recuperó la democracia, y lanzó, entre otras obras, "Cobra" (1977), "O Corpo, o Luxo, a Obra" (1978) y "Photomaton & Vox" (1979).

En el 2008, publicó "A faca não corta o fogo -- Súmula & Inédita", y el año siguiente "Ofício Cantante".