domingo, 7 de agosto de 2011

EL LOCO
Por Luis Alfredo Jiménez

Voy a hablarte de un modo más triste, más noble, como un ebrio, siéntate; puede ser sin fin la noche. ¿Oyes esos pájaros? Están fuera de toda razón; cada uno ha conocido el amor tan sensiblemente que han quedado sin juicio, ya no vuelan: flotan como santos, como ya no los hay. Exactamente lo que tú ves fuera de tu juicio es música; estás en el fondo del mundo, quizás sea tu fondo, aunque puede que sea mi mundo, puede que sea yo el que haya perdido el juicio, y me esté hablando a mí mismo frente a un espejo: recordando lo fatal que es estar sensato; ¡la vida sería demasiado inmensa para yo estar sin sueños! Y estoy bien maduro para mi locura; estuviera condenado al infierno de no ser por ella, de no haberme puesto dentro de sus prudencias: a construir nuevas almas, nuevas muertes; yo sería algo demasiado humano, y menos sincero; sería un santo.
(06-08-11)

0 comentarios: